Nada

Hoy me he levantado pronto para ir a Madrid a comprar la matrícula así que he pasado (estoy pasando) todo el día adormilada, en estado de semi-inconsciencia, sin poder hacer nada de provecho. Es de esos días que no te apetece hacer nada, de esos días grises de tanto calor como hace y lentos de tan pesados como pasan. No me apetece ni leer; suerte que, al menos, me ha dado por escribir. Mañana será otro día. Espero.