Hijoputa

El profesor F**** da clase en cierta Facultad de la Complutense. Es presidente de una ONG de cuyo nombre no quiero acordarme y es un hijoputacínicodemagogo. Me explico.
Remontémonos a una clase de Historia, hace un par de años. Una chica ciega se encuentra entre sus alumnas. El profesor F**** en una muestra más de su carácter excéntrico, no habla en toda la clase, se limita a escribir en la pizarra. La chica, levanta la mano para pedir al profesor, si es tan amable, que vaya leyendo en voz alta aquello que escribe porque ella, al ser ciega, tiene serias dificultades para leerlo. La respuesta del hombre que propugna que "la labor de un voluntario es hacer propias las miserias ajenas" es NO. "Porque yo no estoy aquí para resolver este tipo de problemas". La clase continuó tal cual iba y la chica se quedó sin leer ni escuchar nada de lo que allí se estaba explicando. Tampoco era mucha la pérdida porque ese hombre solo dice subnormalidades que demuestran la mayor de las bajezas humanas (ya hablaré de esto más adelante), pero ella tenía el mismo derecho que los demás a que le impartieran una clase por la que ha pagado.
Más adelante, en esa misma clase, el profesor F**** decide "recomendar" a sus alumnos una lectura de obligado cumplimiento. Se trata de un libro que él mismo ha escrito y que no se encuentra dentro de la oferta de libros en Braille de la ONCE. La misma chica ciega, le comenta al profesor sus dificultades para encontrar el libro y le pide una alternativa de lectura que esté a su disposición para poder ser evaluada del mismo modo que sus compañeros. El profesor Hijoputa dice que hay copias en la Biblioteca, que lo coja. Ella dice que el problema es que, al ser ciega, le cuesta (no puede, joder, es tan difícil de entender!!! Es CIEGA) leer si no es en Braille. El profesor "Solidario" hace caso omiso a sus peticiones y la chica en cuestión tuvo que borrarse de la asignatura. Después de cumplimentar la queja correspondiente, el profesor, 2 ó 3 años después, sigue dando clase y en sus clases dice cosas como: "Si son ciegos y no puede escalar el Everest, que se aguanten, que se queden en su casa y se dejen de gilipolleces, lo que no puedan hacer que no lo hagan" o "por culpa de los ciegos tooooodos sin dormir. Los putos semáforos sonando toda la puta noche para que los cieguitos puedan cruzar y toda España sin dormir" o bien "por qué tiene que haber una fila reservada para minusválidos en todas y cada una de las salas del Kinépolis? Y que yo me tenga que quedar sin ir al cine por esa gilipollez!".
Yo no soy solidaria, ni hago mías las miserias ajenas. Yo soy una hijaputa igual que lo es él, pero me gustaría arrancarle los ojos y dejarle en medio de la calle, sin semáforos de estos que no dejan dormir a los pobres españolitos por las noches; me gustaría que le atropellara un coche y le dejara en una silla de ruedas; me gustaría que, siendo tan solidario como es "porque somo ricos a costa de su pobreza" compartiera su conexión a Internet ("Hay que conectarse a Internet a diario!!"), su móvil, su ropa y su presumible chalet (porque me juego lo que quieras a que vive en un chalet a todo tren). Y me gustaría que así, ciego, sentadito en su chabola, sin poder moverse y sin más distracciones que su propia demagogia, reflexionara acerca de quién es él. Porque él dice que el objetivo de sus clases es que reflexionemos y nos demos cuenta de quiénes somos. Bueno, pues lo ha conseguido: yo soy Carmen y él es un hijoputa. Ahora solo falta que se hunda en la miseria para ver si así se da cuenta de quién es él en realidad, qué es la miseria y qué es el cinismo.
Solo una cosa más. Es indignante que este señor siga dando clases. Pero más indignante es todavía que estudiantes universitarios con una media de unos 20 años de edad, le rían las gracias. Hijoputas todos, yo la primera, ellos además, cínicos estúpidos.