domingo, enero 22

Mensaje en una Blogtella

Escribes algo, pasa el tiempo, lo relees y te parece malo, carente de interés, mediocre.
Escribes algo, lees un buen libro, relees lo que habías escrito y te parece malo, carente de interés, mediocre.
Escribes algo, dejas que alguien que entiende lo lea, te dice que es malo, carente de interés, mediocre.
Escribes algo, pasa el tiempo, lo relees y no te parece malo; escribes algo, lees un buen libro y cuando vuelves a leer lo que habías escrito, te ves envuelto en un texto verdaderamente interesante; escribes algo, dejas que alguien lo lea y ves que no es capaz de decir nada, simplemente, se quita el sombrero y te das cuenta que todo lo que has escrito ha servido y no era tan malo, no carecía de interés, ni mucho menos, y estaba bastante lejos de ser mediocre. Todo lo que habías escrito antes de ese momento ha servido para conseguir un efecto en ti mismo, en el momento que lo escribiste, lo escribiste porque necesitabas hacerlo; ha servido para preparte para ese gran texto que ves que merece la pena que sea leído; ha servido porque ahora todos quieren leerte; ha servido para frustarte porque cuando ya has logrado escribir algo verdaderamente bueno, tienes la sensación de que nunca podrás superarlo... Entonces vuelves a escribir algo malo, carente de interés, mediocre y todo comienza a ser como al principio, con una diferencia: ahora sabes de lo que eres capaz.
Lo creas o no, siempre hay una historia, una frase, una palabra que te hace sentir capaz de cualquier cosa.

1 Comentarios:

Blogger Eugenio said...

Ojalá los buenos ganaran siempre, los problemas siempre se arreglasen y los aspirantes a un trabajo siempre lo alcanzaran. Yo, por ahora, me limito a desear con prisa, con olvido, ser recepcionista, aunque en esta recepción haya aun un buen rato de sol que me está quemando mis fotosensiblísimas piel y ojos

enero 23, 2006 1:39 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home